Después de hacer una reserva de un coche para una semana por un precio moderadamente económico, cuando llegamos a recogerlo el precio se empezó a inflar de manera desorbitada. Te hacen pagar obligatoriamente por un seguro a todo riesgo (muy superior al del resto de compañías) y además el depósito de gasolina (más caro de lo que te costaría llenarlo por tu cuenta en una gasolinera) o pagar una franquicia de 1100-2000 (que ya ves venir que probablemente solo recuperes ni la mitad). En resumen, los 80 euros que piensas que pagas por el alquiler del coche se convierten en 350, toda una estafa y lo peor es el servicio y la mala atención que recibes por parte de los empleados. Nuestra decisión fue perder el dinero de la reserva y alquilar otro coche con otra compañia....