He alquilado durante unos días un vehículo en Europcar, en concreto en Madrid estación de Atocha. Al revisar detenidamente el vehículo al llegar a mi casa me he encontrado con que el coche se encontraba con bastantes daños de chapa y sucio, tanto por dentro como por fuera. La verdad que la imagen que daba el vehículo era pésima.
Durante el uso del vehículo me he encontrado con algunos problemillas. El aviso de falta de presión en los neumáticos me ha saltado en tres ocasiones, habiendo tenido que verificar el estado de los mismos y con la inseguridad de pensar que los neumáticos estaban pinchados. Además no he podido utilizar el móvil, ya que al conectarse, se producían ecos y era imposible comunicarse. Además, para más inri, devuelvo el coche con el tanque de gasolina lleno, lo que queda reflejado en el contrato y relleno por el personal de Europcar, y posteriormente me pasan un cargo de 36 por la gasolina.
He reclamado a Europcar y del estado del vehículo se lavan las manos, y tras mucho protestar he conseguido que me devuelvan el importe de la gasolina.
En definitiva, me siento estafado por el trato dado por Europcar.
Pros
Ninguna
Contras
Una verdadera estafa, dando muy mala imagen