Son unos auténticos impresentables.
Alquilamos un coche diesel en Barcelona para ir 4 días a Suiza. A mitad del camino nos dimos cuenta por intuición que era un coche de gasolina (en el contrato y en todos los sitios aparecía que era diesel). Gastamos 50 en llamadas al servicio de atención al cliente. Gastamos unos 80 más de lo que teníamos previsto en gasolina.
A día de hoy y tras varios miles de intentos de contactar con ellos no nos han devuelto nada.
Aún con todo, nos hicieron un cargo de 80 cuando llegamos de vuelta a Barcelona porque el depósito no estaba completamente lleno.
Así que eso, primera y última vez.